El eje central de la organización del servicio bibliotecario es su consideración de servicio público, de servicio público local. El artículo parte de la experiencia de la biblioteca pública en la provincia de Barcelona, aunque muchas de las reflexiones se pueden generalizar a otros contextos territoriales. La biblioteca pública actúa como servicio público local y en el marco de la sociedad del conocimiento, por lo tanto dando respuesta a las necesidades que los ciudadanos tienen en esta "nueva" sociedad. En general se ha invertido poco, en el desarrollo de las condiciones necesarias para el impulso de la sociedad de la información, tanto en el ámbito económico como en el social. En este objetivo, las administraciones públicas deberían asumir cuatro funciones básicas: la función reguladora, la función promotora, el desarrollo de la administración en línea y la función democratizadora.